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Red Bull gana su segunda carrera esta temporada. Sebastian Vettel se afianza un poco más en lo alto de la clasificación, a diez puntos de Raikkonen, a veintisiete de Hamilton y a treinta de Alonso. Ferrari y Mercedes experimentan el sabor amargo de la decepción.
Poco antes de dar comienzo la carrera el viento provocaba que algo de arena se depositase en el trazado. La temperatura del asfalto era alta. Penalizaciones en la parrilla respecto a la clasificación de la jornada de ayer y mientras Paul Hembery nos prometía haber elegido los compuestos adecuados para esta carrera.
Charlie ponía semáforo y cronometro en marcha. Alonso, tal y como nos tiene acostumbrados, lo intentaba desde la primera curva logrando sobrepasar al alemán de Red Bull que le devolvía el adelantamiento en un curva de quinta velocidad, vacilando del gran agarre que atesora el RB9. Posteriormente, Nico Rosberg se convertiría en la siguiente víctima del que sigue siendo el mejor coche del Mundial y por qué no decirlo, de un tricampeón mundial que no da su brazo a torcer.
El actual número 1 ha simulado la hazaña con la que nos deleitó el asturiano de Ferrari el pasado fin de semana. Con una buena estrategia y ritmos altos y acordes con el cuidado de los neumáticos Pirelli, tan sólo él mismo, sería su único rival durante toda la carrera.
En la sexta vuelta la mala suerte se estacionaba en el alerón trasero del F138 de Fernando provocando que el DRS, tras abrirlo en la zona delimitada para ello, no pudiera volver a su posición normal. A partir de ese momento, la carrera que en un principio se tenía planificada se ha ido al traste. En boxes colocaban el pequeño alerón manualmente. Tanto ingenieros como mecánicos debieron de entender que el "apaño" era suficiente y por lo tanto comunicaron al español que podía volver a usarlo. Craso error. Lo único que consiguieron fue una nueva parada que provocó perder otros veinte segundos muy valiosos.
¿Se está convirtiendo en una tradición tomar estas decisiones desde el muro de Ferrari al más puro estilo Malasia? De no haber tenido que realizar esa parada quizás podría haber estado luchando con Grosjean por el tercer o cuarto puesto. La mala suerte, ya puesta, visitaba después el coche de Massa, al que un pequeño toque con un rival le dejaba dañado el alerón delantero. Ferrari, de nuevo incomprensiblemente bajo mi punto de vista, decidía no sustituírselo. El brasileño salía desde la cuarta posición. Ha finalizado el decimoquinto.
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Sebastian Vettel lograba abrir un hueco importante con sus perseguidores. Mientras tanto Webber, que llegaba a colocarse segundo "a rueda" de su compañero de equipo, traspasaba la línea de meta en una discreta séptima posición.
Los McLaren nos brindaban un bonito duelo entre sus dos monoplazas. Sergio Pérez y Jenson Button hacían vibrar a los espectadores y temblar a Martin Whitmarsh. Los dos pilotos estuvieron varias vueltas adelantándose mutuamente. El mexicano incluso, ha llegado a golpear con su alerón delantero el neumático trasero del piloto británico, que se dirigía por radio a su ingeniero pidiendo calma a su perseguidor.
Para Mercedes, este tampoco ha sido un fin de semana ideal. Hamilton ha sido quinto y el hombre que salía desde la pole, Nico Rosberg, ha tenido que solventar una carrera en la que ha ido de más a menos y en la que ha terminado en la novena posición cosechando tan sólo dos puntos.
Alonso, en su particular carrera, se agarraba como a un clavo ardiendo a su nueva estrategia de intentar conservar las gomas al máximo e intentar realizar una parada menos que el resto. Imposible de llevar a cabo con la alta temperatura del asfalto.
Finalmente una nueva victoria para el piloto alemán, que ha roto la racha de tres ganadores diferentes en las tres primeras carreras. En el podio le han acompañado los dos pilotos de Lotus, un equipo indiscutible que está demostrando ser altamente competitivo y sobre todo, indudable en el cuidado de las gomas. Grandísima carrera también la de Paul di Resta, cuarto clasificado con su Force India a tan sólo dos segundos de subir al podio. Fernando Alonso, que ha sido octavo, se ha agenciado cuatro puntos que saben a gloria.
En quince días Alonso corre en casa. El Mundial se traslada al circuito de Montmeló, llega el Gran Premio de España, donde intentaremos ver cómo Fernando recorta distancias en la clasificación.
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