viernes, 28 de diciembre de 2012

El tributo pendiente de "Beco"


Muchos de vosotros aun recordareis con nitidez aquel fatídico 1 de Mayo de 1994 en el circuito de Imola. Ayrton Senna perdía la vida tras impactar su monoplaza en el muro de la curva Tamburello a una velocidad de 211 km/h. Yo tenía tan sólo 8 años,era una de las primeras carreras que veía, y aun me emociono al recordar la imagen en el televisor del helicóptero elevando el cuerpo (posiblemente ya sin vida) de Senna.


Aquel domingo no le acompañaba el mismo estado de ánimo que en la mayoría de las carreras.Senna siempre destacó,entre otras muchas facetas,por su lucha a favor de la seguridad de todos los pilotos.Era un piloto que si era necesario paraba su coche en la pista y corría a socorrer a sus rivales, de esa manera fue como salvó la vida a Érik Comas, apagando el fuego de su coche y evitando una posible explosión de gasolina con Comas dentro del vehículo. Pero aquel fin de semana de Mayo todo salió de la peor manera posible.

El día anterior, durante la jornada de calificación, su compañero de parrilla Roland Ratzenberger (Escudería Simtek) perdía la vida en la curva Gilles Villeneuve al perder el control de su monoplaza, debido a la pérdida del alerón delantero, golpeándose a más de 300 km/h casi de frente contra el muro.El golpe le provocó una fractura mortal en la base del cráneo. Ratzenberger, nacido en Austria, disputaba en aquel GP de San Marino su tercera carrera en Fórmula 1. A pesar de su más que corta trayectoria es considerado por algunos "el último caballero de la F1".


Desde 1986 con la muerte de Elio de Angelis, ningún piloto había perdido la vida a bordo de su monoplaza. Después de aquella escena del Sábado y muy afectado por lo acontecido, el que fuera llamado por su familia con el sobrenombre de "Beco", Ayrton Senna, decidió querer rendir homenaje al finalizar la carrera a Roland. Los comisarios del circuito, en el momento de retirar los restos del coche del brasileño, encontraron en el "cockpit" una bandera que no pudo llegar a exhibir, la bandera de Austria en honor al joven piloto. Un tributo que quedó pendiente en el asfalto de Imola.


A principios de esa ominosa temporada de 1994, Senna concedió una entrevista en la que dijo que le gustaría que la selección brasileña de fútbol, como él, lograra el tetra-campeonato ese año. El 17 de Julio la selección ganó el Mundial en la final disputada contra Italia en California, y le rindió este homenaje al piloto. "Senna...aceleramos juntos, el Tetra es nuestro".





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