En tierras pantanosas (II)

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No parecería que estás leyendo sobre el Gran Premio de Malasia si no comienzo a escribir contando lo que pasó a partir de la vuelta 44, cuando Mark Webber recibía un mensaje por radio en el que le decían que ya estaba todo hecho, que se cumpliera la órden número 21 hasta el final. 

¿Qué significa ese mandamiento en el equipo Red Bull? Fácil, el número dos delante del uno, el segundo piloto por delante del primero. Pero Vettel se saltó las normas. La ambición pudo completamente con la modestia. Para el tricampeón alemán no era suficiente pasar la línea de meta en una formidable segunda posición y haber llegado a China también de esta manera, con la batuta del Mundial.

Fueron dos vueltas con una lucha divertida entre los dos coches de Newey y compañía, que veían desde la barrera como sus dos "miuras" se desafiaban entre sí. Quizás esta situación mostrara la rigurosa jerarquía que existe en la escudería austríaca. Un toro mandón llamado Sebastian que domina y maltrata, y Mark, el toro abochornado, el derrotado de la manada.

Lo mejor de todo es que no sólo fue el duelo en Red Bull lo que pudimos ver en la segunda carrera de este año. Hubo más incidentes y anécdotas, desde el abandono de Fernando Alonso hasta la visita de Hamilton al box de McLaren.

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Fernando salió desde la tercera posición con intención de luchar por la victoria. Un toque en el segundo giro contra la parte trasera del RB9 hizo que el F138 del español sufriera daños en su alerón delantero. El asturiano trató de mantener el coche en pista a pesar de todo y completó la primera vuelta. Para sorpresa de muchos, el piloto de Ferrari no pasó por boxes para reparar el bigote y gracias a la fricción que sufren todas y cada una de las piezas a velocidades altas, tras pasar por línea de meta defendiendo la posición con Webber y frenar para tomar la primera curva, el alerón cedió y fue a a parar a la parte baja del coche. Fernando, sin posibilidad de girar la dirección y sin estabilidad alguna, acabó estancado en la grava del circuito malayo. Ya sé que desde fuera resulta muy fácil pero lo cierto es que aun perdiendo toda posibilidad de victoria e incluso de subir al podio, dejar un coche en esa situación esperando a que la pista se secara y así aprovechar la parada para desechar los neumáticos intermedios, no resultó ser la estrategia adecuada. Tampoco creo que la situación del Mundial obligase a la escudería italiana tomar esa decisión, pero lo hecho, hecho está. Por otro lado Massa, abandonado por parte de la realización durante la mayor parte de la carrera, anduvo luchando cada vuelta para acabar siendo quinto con un monoplaza que, en mi opinión, no acaba de convencer.

En Force India, sus dos monoplazas finalizaron la carrera antes de tiempo. Un doble abandono que sabe mucho peor debido al buen rendimiento que mostraron durante los entrenamientos libres del Viernes y la jornada de clasificación del Sábado. La situación prometía para Sutil y Di Resta que vieron como varios errores graves en los pit-stops provocaban que ninguno de los dos sumara una interesante cantidad de puntos para el equipo.

Mal comienzo de McLaren que no acaba de dar con la tecla que exprima al 100% un MP4/28 que prometía más de lo que está demostrando. Un error en el cambio de ruedas (mala colocación del neumático delantero derecho) hizo que Jenson Button perdiera cualquier posibilidad de estar en los puestos de arriba. Sergio Pérez, por su parte, sí pudo acabar dentro de la zona de puntos con un noveno puesto que sabe a poco en el equipo que dirige Martin Whitmarsh. Quizás no era tan mala idea aquello de volver al monoplaza de la temporada pasada.

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En Mercedes están mucho más sonrientes. El coche parece funcionar y se muestra muy competitivo. Su piloto Lewis Hamilton tuvo que demostrar saber pedir disculpas y ser agradecido. Lo primero debido a la anecdótica visita en el pit-lane a sus antiguos mecánicos de McLaren cuando el británico se disponía a hacer su primera parada en boxes. Lo segundo por el tercer puesto logrado en gran parte gracias al compañerismo de su, ahora más que colega, Nico Rosberg, el cuál supo digerir con gran caballerosidad su papel en el equipo después de que desde el muro, presidido por Ross Brawn, le dieran voto negativo a su petición de adelantar a Lewis cuando el alemán estaba siendo mucho más rápido con diferencia.

Tras todo lo acontecido este fin de semana, el "Gran Circo" se toma un descanso para volver el 14 de Abril a China, al circuito de Shanghai, donde tocará de nuevo madrugar para disfrutar de un nuevo episodio de lo que promete ser un Mundial, una vez más, apasionante.